Sí: es posible conocer lo mejor de Berlín en dos días. Si estás dispuesto a madrugar -un poco- y a caminar lo suficiente, verás que 48 horas en Berlín dan para mucho y en ese tiempo podrás hacerte una buena idea de los lugares más significativos de la capital alemana gracias a nuestra ruta de dos días en Berlín. ¿Comenzamos?
Itinerario para ver Berlín en 48 horas
Día 1 – De la Puerta de Brandeburgo al paso fronterizo más famoso de Europa
En nuestro primer día en Berlín vamos a visitar algunos de sus lugares más icónicos en una ruta a pie (¡prepara buen calzado!) a través de la que conoceremos los principales puntos de interés turístico de la ciudad.
Mañana
- Nuestra primera parada del día será la Puerta de Brandeburgo (metro Brandenburger Tor), el monumento más fotografiado de la capital alemana. Junto a ella se encuentra el Memorial del Holocausto, inconfundible con su peculiar estructura formada por cientos de bloques grises de hormigón a diferentes alturas, y dedicado a las víctimas judías del nazismo.
- Un poco más allá, frente al parque Tiergarten, verás el Reichstag, el parlamento alemán, a cuya cúpula te aconsejamos subir tanto para contemplar las magníficas vistas de Berlín como para admirar su arquitectura vanguardista. Para subir a ella tendrás que reservar con (bastante) antelación para un día y una fecha concreta, tal como te explicamos en nuestro artículo sobre cómo visitar el Reichstag.
- Una vez visto el Reichstag, vuelve a cruzar la Puerta de Brandeburgo para caminar por la avenida Unter den Linden hasta la Gendarmenmarkt, la que dicen es la plaza más bella de Berlín. Antes de llegar a la plaza haz una breve parada en el Edificio de la Nueva Guardia de Berlín (Unter den Linden 4).
- Continúa hasta la Gendarmenmarkt, que reconocerás rápidamente por sus dos catedrales, una francesa y otra alemana, separadas por el edificio neoclásico de la Konzerthaus.
Si ya tienes hambre (recuerda que en Alemania se come un poco más temprano), puedes comer por esta zona, donde encontrarás infinidad de restaurantes y cafeterías. Si optas por comer algo rápido para seguir haciendo turismo, puedes asomarte a la cercana Friedrichstraße, la principal calle comercial de Berlín, llena de los típicos restaurantes de fast food que todos conocemos. En ella se encuentran también las Galerías Lafayette. Y si te apetece un buen postre, a dos pasos de la Gendarmermarkt encontrarás una de las mejores pastelerías del la ciudad, Rausch Schokoladenhaus (Charlottenstraße 60), famosa por su chocolate.
Tarde
- Desde la zona de la Gendarmenmarkt, si continúas bajando por Friedrichstraße, en diez minutos estarás en el Checkpoint Charlie (Friedrichstraße 43-45), uno de los pasos fronterizos que separaba el Berlín soviético del Berlín occidental, pero sin duda el más famoso y uno de los que (tristemente) más berlineses trataron de cruzar, no siempre con éxito.
- Poco queda allí del Checkpoint Charlie original, pero con la reproducción del puesto de vigilancia puedes hacerte una idea del aspecto que tenía (y si te animas, hacerte una foto con los dos «guardias» que lo custodian, siempre dispuestos a posar con los turistas a cambio de una pequeña propina).
- Si te interesa conocer más a fondo este período histórico, puedes acercarte al Museo del Muro del Checkpoint Charlie, que está justo al lado (en Guías Nómadas no lo consideramos una visita obligada, pues la exposición no es demasiado didáctica, pero si tienes tiempo suficiente puedes hacerla).
- Desde el Checkpoint Charlie vamos a girar por la Zimmerstraße y dar un pequeño pasado hasta llegar a Topografía del Terror (Niederkirchnerstraße 8). En esta exposición sí que te recomendamos encarecidamente entrar, pues se trata de una especie de museo gratuito dedicado a los aparatos de control del gobierno nazi, que realiza una detallada descripción del origen y funcionamiento de los instrumentos militares utilizados durante el nazismo, como las SS. La exposición es muy completa y se acompaña de fotografías, textos en alemán e inglés y vídeos. A la salida del complejo puedes ver aún los restos de la antigua prisión de las SS y una parte del muro de Berlín.
- Desde Topografía del Terror puedes acercarte a la Potsdamer Platz, a unos 10 minutos a pie (no olvides echar un vistazo por el camino, en una de las calles que quedan a mano derecha, a la antigua torre de control soviética que se ha conservado prácticamente intacta).
- La Potsdamer Platz tiene cierto ambiente por la noche, pues es el lugar donde se celebra el festival de cine de Berlín y cuenta con un centro comercial (Potsdamer Platz Arkaden), numerosos restaurantes y un par de fragmentos del antiguo muro situados en mitad de la plaza. Si cuando llegues a la plaza todavía es de día y el cielo está despejado, te aconsejamos subir a Panoramapunkt, el mirador de la Torre Kollhoff, el central de los tres rascacielos que seguro te llamarán la atención en Potsdamer Platz.
Día 2 – Lo que queda del muro, el Museo de Pérgamo y las mejores vistas de Berlín
Esperamos que hayas descansado bien esta noche porque nuestro segundo día en Berlín viene completito…
Mañana
- Como está algo alejado del centro, hoy vamos a comenzar visitando el muro de Berlín. Bueno, lo que queda de él, concentrado en la East Side Gallery, una galería al aire libre plasmada sobre el fragmento de muro más largo conservado, y que hoy luce las obras de cientos de artistas internacionales. Para llegar utiliza el metro hasta Warschauer Straße o el tren hasta Ostbahnhof.
Recorrer la East Side Gallery te llevará, como máximo, una hora. Desde allí puedes cruzar por el Puente de Oberbaum para disfrutar las vistas sobre el río Spree y adentrarte en el barrio más hispter de Berlín: Kreuzberg. Si ya te ha entrado hambre, una opción económica es comerse una hamburguesa en Burgermeister, uno de los quioscos más famosos de Berlín (probablemente por su situación bajo las vías del tren, junto a la estación de Schlesisches Tor). A nosotros nos gustan más las hamburguesas de The Bird (que tiene varios locales en la ciudad), pero estas no están nada mal para matar el gusanillo sin perder demasiado tiempo. Otra alternativa barata para comer es Sheers Shnitzel, en Warschauer Strasse, muy cerca de la East Side Gallery.
Tarde
Para pasar la tarde de tu segundo día en Berlín, te damos dos alternativas para que escojas en función de tus gustos:
- Ve en metro desde Schlesisches Tor hasta Friedrichstraße y camina hasta la Isla de los Museos. Si no dispones de mucho tiempo y tienes que escoger uno de los cinco museos que la componen, que sea el Museo de Pérgamo: la visita te llevará un par de horas y merece la pena, ¡es impresionante! Al salir, todavía en la Isla de los Museos, puedes visitar el Museo Nuevo, donde se encuentra el famosísimo busto de la reina egipcia Nefertiti, o acercarte hasta la Catedral de Berlín, desde cuya cúpula se obtienen unas vistas fantásticas de todo el centro de Berlín. Al salir de la catedral cruza el puente (no olvides darte la vuelta para hacer una bonita fotografía con la catedral de fondo) y estarás junto al Marx-Engels Forum, donde puedes hacerte una foto con la estatua de Marx y Engels. Justo al lado reconocerás el Ayuntamiento Rojo y, frente a él, la Fuente de Neptuno. Si has llegado hasta aquí, ya estás en la plaza más mítica de Berlín, la Alexanderplatz. Aprovecha para subir a la terraza panorámica de la Torre de Televisión (incluso a cenar en su restaurante si te apetece darte un pequeño capricho) y échale un vistazo al Reloj Mundial, que da la hora en diferentes países. Si aún te sobra tiempo, acércate paseando hasta Nikolaiviertel, el barrio más antiguo de Berlín, situado justo detrás del Marx-Engels Forum, por donde puedes cenar.
- Coge el metro en Schlesisches Tor hasta Wittenbergplatz. Al salir verás el gran edificio de las Galerías KaDeWe, las más famosas de Berlín y un buen lugar para comprar algunos recuerdos, comida típica alemana o regalos. También puedes tomarte un café acompañado de una buena tarta en el buffet de la última planta. En la misma zona encontrarás el zoo de Berlín y el acuario (una opción para pasar la tarde si viajas a Berlín con niños) y un poco más allá, la Iglesia del Recuerdo o Iglesia Memorial del Kaiser Guillermo, inconfundible por tu torre partida, destruida durante el bombardeo de Berlín en 1945, al final de la Segunda Guerra Mundial. Cerca encontrarás otro centro comercial interesante para los amantes de las compras, el Bikini Berlin, que en esta caso cuenta con numerosas tiendas de nuevos creadores y marcas alemanas. Desde la terraza hay buenas vistas del Tiergarten y un café muy acogedor donde tomar algo. Después puedes salir a la Kurfürstendamm, la calle de tiendas más transitada de Berlín. Si te gusta la Navidad, aprovecha para hacer una visita a la tienda navideña Käthe Wohlfahrt, justo al lado de la salida del metro de Kurfürstendamm (y no apta para Grinchs).