Los balcones se llenan de flores. Los banderines de colores atraviesan las calles de lado a lado. El olor a sardinas a la brasa lo impregna todo, y la música que sale desde cualquier ventana nos recuerda que durante el mes de junio, Lisboa se pone bonita para celebrar su fiesta grande: las Fiestas San Antonio.
¡Bienvenidos a las Fiestas de Lisboa!
Y lo del mes es literal, puedes desde el primer día de junio hasta el día 30, cuando un espectáculo pirotécnico sobre el Tajo ponen fin a la celebración, la ciudad, y sobre todo el barrio de Alfama, es una auténtica verbena a la portuguesa.

Es en estos días cuando la vida cultural de la ciudad bulle más que nunca gracias a los numerosos conciertos, exposiciones, obras de teatro y espectáculos musicales para todos los gustos que se dan cita en la capital portuguesa.

El origen de las Fiestas de San Antonio
San Antonio de Padua es el patrón de Lisboa (aunque comparte título con San Vicente). Se cuenta que el santo nació en Lisboa, pero murió en Padua un 13 de junio. Así pues, ambas ciudades comparten patrón y la noche del 12 al 13 conmemoran al santo con sus fiestas populares.

San Antonio fue un fraile y teólogo nacido a comienzos del siglo XII; famoso por su facilidad de palabra, la leyenda cuenta que cuando el sepulcro donde se conservaban sus restos (en la Basílica de San Antonio de Padua) fue abierto varios años después de su muerte, la única parte de su cuerpo conservada intacta era la lengua.

Un bodorrio por todo lo alto
Todos los años, unas cuantas parejas de novios tienen el privilegio de casarse en una boda masiva celebrada en la Catedral de Lisboa, al amparo de San Antonio, que también ejerce como garante del amor y del matrimonio (suponemos que por la fama de casamentero que avala a este santo desde hace cientos de años).

Esta curiosa tradición comenzó en los años 50, como una oportunidad de contraer matrimonio para aquellas parejas que no podían costearse una boda. Actualmente, tienen cabida en esta selección hasta los matrimonios civiles.

Tan venerado es San Antonio como santo de los casamenteros que es tradición en Portugal que los jóvenes solteros cuelguen en sus ventanas una imagen de San Antonio… bocabajo.

A ver si así le llega mejor la sangre a la cabeza al santo, y les busca una media naranja con la que convertirse en uno de esos novios o novias de San Antonio que pueden casarse en un escenario único como la Sé de Lisboa.

La noche más larga
Durante la noche del 12 al 13 de junio tiene lugar el punto álgido de las fiestas de San Antonio, con una gran marcha callejera que recorre toda la Avenida da Liberdade, donde cada barrio prepara un pasacalles y compite por el primer premio al mejor desfile.
En el 2018 el desfile de las Fiestas de Lisboa tendrá lugar el martes 12 de junio y comenzará a las 21:00 horas.

Para ver bien el desfile lo mejor es situarse en la acera frente al hotel Avenida Palace, pues la mayoría de turistas se concentran en la parte alta de la Avenida da Liberdade, desde donde sale.

En 2015, el tema protagonista de estas marchas populares fueron los 500 años que cumple la Torre de Belém, el monumento más fotografiado de Lisboa y testigo de los años de máximo esplendor comercial de la ciudad. En 2016, el tema era Bordalo Pinheiro, uno de los artistas portugueses más importantes y reconocibles.

La fiesta se prolonga durante toda la noche.

Por todos los rincones de Alfama encontraréis parrillas humeantes llenas de sardinas, lisboetas y turistas apretujados por las callejuelas de Alfama cerveza en mano y el sonido de algún fado lejano que termina de ponerle el punto de autenticidad a esta particular fiesta.

La sardina: la reina de la fiesta
Las fiestas de San Antonio acogen todos los años un peculiar concurso, el Concurso Sardinhas Festas de Lisboa, que nació hace más de una década y que está protagonizado por el icono de los iconos de las fiestas lisboetas: la sardina.

Dibujantes, ilustradores, artistas y no tan artistas repartidos por todo el mundo presentan el diseño de su propia sardina.

De entre todos los participantes se escogen cinco sardinas ganadoras, que serán la imagen de las Fiestas de Lisboa para ese año (los ganadores, además, se llevan un premio de 2.000 €). ¿No está mal, verdad?

Así que además de engullirlas bien churruscaditas, los lisboetas también veneran a la sardina y durante el mes de junio es frecuente verla representada en cualquier espacio de la ciudad, decorando puertas y ventanas.

Durante las fiestas de San Antonio también es frecuente encontrar numerosos puestos donde las señoras portuguesas venden pequeños tiestos de mangerico (albahaca).

Se trata de la planta asociada a estas fiestas, en cuya maceta se hunde un clavel de colores y se coloca encima una banderilla con unos versos.

¿Viajar a Lisboa en junio? Sí, sí y sí
Si tenéis oportunidad de escoger cuándo viajar a Lisboa, hacedlo en junio, para sumergiros en el ambiente festivo de la ciudad y especialmente en el del barrio de Alfama, cuya esencia popular y callejera se respira en cada rincón durante estos días.

Unas fiestas como la propia Lisboa: ruidosas, alegres, vibrantes y sobre todo muy acogedoras.
